Las clases de Hebe Uhart es el mejor homenaje que una alumna le puede hacer a su maestra: dejar su legado por escrito para que su mensaje se disemine por fuera del círculo inicial.
Durante 10 años, Liliana Villanueva asistió al taller de escritura que daba Hebe Uhart (1936-2018) y a partir de un momento, decidió empezar a transcribir las notas que había tomado en esos encuentros. Con el visto bueno de la autora de «Un día cualquiera», «Camilo asciende» y «Del cielo a casa», se armó un libro que tiene el tono de una conversación en capítulos (con títulos como “El lenguaje y el misterio”, “El ‘pero’, la fisura y el cuento”, “De dónde surge un cuento”, “Construcción de personajes”, “El humor en la escritura”, entre otros) que sirven de guía para quien quiera sentarse a escribir. Como en las obras clásicas o de estudio, antes de cada capítulo hay una síntesis de los temas que se tratarán y luego sí, la voz sobria y los conceptos precisos de alguien que construyó una obra singular, sin ataduras.
Al cabo de la lectura, se saca en limpio que a Uhart le interesaba mucho a la hora de escribir, el habla de la gente en los lugares, la observación y la escucha como estados de atención, y también su desdén a la literatura escrita por escritores para escritores. Sostiene que escribir es comunicar y recomienda hacer crónicas de la propia infancia para empezar a familiarizarse con el primer personaje del que se puede escribir, que es uno mismo.
En el cierre, el libro incluye un Decálogo que sintetiza lo leído, pero la gracia de estas clases está en seguir esa voz tan humana que se desgrana página a página. El volumen cierra con dos ensayos escritos por Hebe Uhart que profundizan y amplían algunos temas: “El escritor y los lugares comunes” y “El humor en los escritores de la generación del 80 del siglo XIX”.
1- No hay escritor, hay personas que escriben
2- Escribir es una artesanía, un trabajo como cualquier otro.
3- Para escribir hay que estar, como decía Chéjov, «a media rienda».
4- La literatura está hecha de detalles.
5- El primer personaje somos nosotros mismos.
6- No importa el hecho en sí mismo, sino la repercusión del hecho en mí o en el personaje.
7- Al personaje se entra por la fisura.
8- Todo cuento tiene un «pero». El «pero» me abre el cuento.
9- Hay que saber observar y escuchar como habla la gente.
10- La verdad se arma en el diálogo.
11- El adjetivo cierra, la metáfora abre.
Hebe Uhart
Ideal para quienes buscan inspiración para escribir o seguir haciéndolo.
Publicado por Blatt y Ríos
Diseño de tapa: Iñaki Jankowski
Hebe Uhart en Pispear:
– Del Cielo A Casa – Hebe Uhart